En la Avenida del Puerto, los creadores de Bar Mistela han construido otra catedral del almuerzo en Valencia. «Ron, fuego y café» es su lema. ¿El nombre? Bar Cremaet, toda una declaración de intenciones.
En la artería que une la Valencia más céntrica con la portuaria nace un espacio dedicado al esmorzar, las raciones, las brasas y los arroces. Una carta de bar de toda la vida, pero con aires actuales. Misma esencia que en Mistela, Cremaet es la guinda del pastel que le faltaba a la ciudad.
«La ubicación, situados en el antiguo Camí al Grau (donde se producía la unión entre el puerto de Valencia y la ciudad histórica), es el vehículo para reflejar la historia del cremaet y cómo llega a la ciudad a través de este camino», explican sus creadores.
Esa unión entre tradición y modernidad se da en la carta, con la revisión de los bocadillos más tradicionales de Valencia (Top Mussafes 3.0, Brascabra o El Guiri, entre otros), tapas de una calidad superior y la recuperación de un café de uelos que ahora piden tanto mayores como jóvenes, el cremaet.
Aunque si no eres mucho de café, puedes probar su tiramisú de cremaet, una alternativa para poder decir que por lo menos has probado uno de los mejores cafés con ron de Valencia.
Cremaet está en El Grau, junto a la famosa Casa del Médico, o Palacio de Burgos, uno de los edificios históricos de Valencia y cuya rehabilitación arrancó en 2020 tras los meses iniciales de la pandemia.
Detrás de esta creación está el Grupo Gastroadictos, fundadores también del mencionado Mistela y La Sastrería en El Cabanyal.