
Solo el 2% de las viviendas de cada barrio podrá destinarse a apartamentos turísticos. La Junta de Gobierno Local de Valencia ha anunciado hoy el borrador de la nueva normativa que regirá el alquiler turístico en la ciudad de Valencia, y esta será una de las principales novedades.
Esta limitación del 2% afectará a todos los barrios, excepto Ciutat Vella, que cuenta una regulación específica.
Como sucedía con la nueva moratoria ya aprobada de alquileres, no se permitirá que los apartamentos turísticos estén en edificios con otras viviendas de uso residencial, salvo que cumplan las siguientes condiciones: estar ubicados en bajos o en la primera planta, pero con acceso independiente al resto de la finca.
Si el bajo de un edificio residencial se quiere destinar a apartamento turístico, deberá contar con el consentimiento de la comunidad de vecinos, registrado en sus estatutos, detalla el consistorio.
Valencia establece a partir de ahora, además, un límite a las nuevas licencias: no se podrán crear nuevas plazas turísticas (hoteles y apartamentos) en los distritos donde las plazas turísticas existentes superen el 8% del número de vecinos empadronados. Por ejemplo, si en un distrito viven 10.000 personas, no podrá haber más de 800 plazas turísticas (8% de 10.000). Si ya se ha llegado a ese número, no se permitirán más alojamientos turísticos nuevos.
Una cifra que ya se supera en zonas como Poblats Marítims y Ciutat Vella. En estos casos, no se permitirá la emisión de nuevas licencias.
Tampoco se permitirá que las viviendas turísticas superen el 5% del total de viviendas en una misma manzana residencial, evitando así concentraciones excesivas en zonas reducidas.
En cuanto a la reversión de local comercial a vivienda, solo el 15% de los locales comerciales dentro de una manzana residencial podrán destinarse a viviendas turísticas. El 85% restante deberá tener otros usos terciarios, como oficinas, peluquerías, restaurantes, farmacias, clínicas, etc.
A partir del 1 de julio, se implementará el sistema nacional de seguimiento de alquileres de corta duración, llamado Ventanilla Única Digital de Arrendamientos de España, para tener un control más exhaustivo de los datos a la hora de establecer controles por zonas.
El borrador de esta norma pasará ahora a una fase de consulta con vecinos y grupos políticos, antes de ser aprobada definitivamente en pleno. Mientras, Valencia mantendrá activas las dos moratorias al alquiler turístico aprobadas a nivel general y en el Cabanyal, que suspenden la tramitación de licencias turísticas.