Valencia sigue sacando toallitas del colector más importante de la ciudad. Los trabajos para desatascar el alcantarillado norte cumplen dos años con una elevada factura económica y medioambiental: 3 millones de euros y 5.000 toneladas de residuos.
La limpieza del colector norte se centra ahora en los conductos que unen la Ciutat de les Arts y la playa de Pinedo, después de extraer más de un kilómetro de longitud de toallitas, bastoncillos y otros productos higiénicos no aptos para desecharse por el váter. Pero Valencia sigue desbordada.
Según adelanta eldiario.es, el Ayuntamiento dirigido por Joan Ribó va a invertir este año otros 12 millones de euros (el 50% proceden del Banco Europeo de Inversiones) para finalizar la limpieza y las obras complementarias para evitar que el problema se repita en el futuro. Se estima que el «monstruo de las toallitas» podría desaparecer a mediados de 2020.
El concejal del Ciclo Integral del Agua, Vicent Sarrià, ha señalado recientemente que «es imprescindible que la ciudadanía tome conciencia de este problema».
«Hemos de tomar conciencia en nuestra casa, donde nadie nos puede vigilar aunque la ordenanza municipal prohíba este tipo de vertidos al inodoro. Mucha gente piensa que tirar las toallitas al retrete es un gesto inocente, también por el etiquetado confuso de estos productos», ha añadido.
Foto de portada: El Confidencial