Valencia está bañada en queso. Desde este mes de febrero, la ciudad cuenta ya con dos locales especializados en todo lo que tiene que ver con el queso. Uno de ellos, La Majada, es un clásico de la ciudad. El otro, un recién llegado que viene pisando fuerte desde Vila-real: Quesomentero.
Este «cheese bar» quiere convertirse en el paraíso de todo amantes del queso. Cuenta con 120 variedades diferentes, que plasman en diferentes platos y propuestas. «Queremos transmitir nuestro amor por el queso y explorar junto a nuestros clientes las posibilidades de este alimento a través de nuestros platos: tablas, tostas, ensaladas, panmenteros, fondues y postres«, explican en su página web.
La idea de Quesomentero nace de Alberto Santos, un apasionado de este lácteo. El embrión se comenzó a gestar en su blog, donde compartía datos y curiosidades sobre este producto.
Más adelante, trasladó el proyecto a Quesomentero Cheesebar, un restaurante que abrió sus puertas en 2015 en Vila-real, en la provincia de Castellón. Tras un éxito arrollador en los últimos 7 años, ahora exporta esta idea a Valencia, a la calle Maestro Clavé 8, en el distrito de Ciutat Vella.
A Quesomentero se puede venir tanto a disfrutar de la carta, repleta de platos con queso fundido, o a comprar directamente las variedades disponibles en ese momento.