La adrenalina recorre tu organismo libremente y con fuerza, ¿verdad? No eres capaz de vivir sin un chute periódico de aventura. Pues oye, estás en el sitio adecuado porque no importa qué tipo de riesgo te atraiga más: tenemos de todo para ti. ¿Quieres volar? Volarás. ¿Quieres mojarte? Te mojarás. Estos son los deportes aventureros para ti.
Deportes de agua
Si te gusta todo lo que tenga que ver con el agua y con hacer rafting, descenso de aguas bravas y demás estás de suerte: de todo se puede hacer en Valencia. El embalse de Contreras y el río Cabriel (uno de los más limpios de Europa) son sitios ideales para pasar el día dándole al remo.
También la Venta del Moro es un buen lugar a apenas una hora del cap i casal. Muchas son las empresas que te alquilan el material y hasta te proponen rutas de kayak, rafting o barranquismo acuático, según sea lo que prefieras.
Hay una opción más y que no es tan conocida, pero que puede dar para kilos y kilos de diversión. Se trata del blob jump: una bolsa de aire gigantesca medio inflada sobre la que se coloca una persona. Sobre el otro extremo saltarán dos más, creado un efecto catapulta. ¿De aire o de agua? A tu juicio lo dejamos.
Deportes de aire
A lo mejor lo que prefieres es volar. Desde que los hermanos Montgolfier alzaron el primer globo y los hermanos Wright volaron en su aeroplano no hemos dejado de encontrar formas de surcar los aires. Aunque solo sea hacia abajo.
A la espera de que se pueda saltar sobre el aeródromo de Requena, ahora mismo la mejor opción para hacer paracaidismo está en el de El Pinar en Castellón. Pero si no quieres salir de la provincia siempre puedes hacer parapente. Villar del Arzobispo es una zona donde se ofrece este tipo de actividad.
Deportes de montaña
Es lo que queda, que no es poca cosa. Desde senderismo y rutas a pie, que ya os comentamos que hay muchas y bien bonitas, pasamos a otras más potentes como el barranquismo o la espeleología.
Descender los barrancos de Carcalín, el Río Fraile o la Hoz seguro que te hacen chorrear la adrenalina a cántaros llenos. Por otra parte, sentirte como el mismo Indiana Jones explorando la Cueva de las Maravillas (solo por el nombre ya llama) en Alzira, ¿a qué esperas?