Todos tenemos claras muchas de las leyes que hay que cumplir, y muchos conocemos también los principios básicos de convivencia. Pero siempre hay cosas que están prohibidas y que hacemos, de forma consciente o inconsciente, allá donde vamos. Valencia no iba a ser menos, seguro que alguna te sorprende.
1. Entrar con el perro al cementerio
No es raro aprovechar algún momento libre que tengamos para ir a visitar a los seres queridos que ya murieron en el cementerio. Lo que puede que no sepas es que está prohibido que los animales entren ahí. Puede que te confundas porque ni siquiera hay un cartel que te lo comunique, pero así es según el Artículo 8 de la Ordenanza de Cementerios y Servicios Funerarios Municipales.
2. Lavar el coche en la calle
La típica escena de quien se acaba de comprar un coche y a la más mínima mota de polvo sale con su paño y su limpiatodo resulta que está prohibida en nuestras calles. Ni enjuagar ni reparar el vehículo. Hale, a dejarse los cuartos en la gasolinera de turno.
3. Dejar comida a los gatos
Menos mal que existen iniciativas como El Passatge dels Gats, porque resulta que tampoco se nos permite poner comida a los gatos callejeros. No al menos así de alegremente, necesitas una autorización especial. Hale, al ayuntamiento a pedir el carnet de alimentador (no es broma, se llama así).
4. Saltar en la calle
ARTÍCULO 47 Se prohíbe a los peatones: […] 2. Correr, saltar o circular de forma que moleste a los demás usuarios. Pues nada, a partir de ahora en vez de andar, desfilaremos militarmente.
5. Poner carteles de “Se vende” en los coches
Si quieres vender tu coche no lo puedes tener aparcado en la vía pública ni publicitar su venta. Como tu coche esté en esas condiciones durante más de 72 horas te puede caer una multa de hasta 750€. Igual te compensa si vendes el coche, pero yo me lo pensaría dos veces…
6. Patinar
Y no solo con patines: monopatines, patinetes, segways y similares son elementos prohibidos en nuestras calles salvo por las zonas destinadas específicamente a ello. Esto incluye aceras y calzadas, ojo. Y la sanción puede llegar a los 500€.
7. Lavarse en las fuentes
Vale, esto no pensaba hacerlo jamás, pero que sepas que es que además es una actividad prohibida. No puedes lavarte tú, ni tu ropa, ni tu mascota. Con la única excepción de las celebraciones deportivas, claro está. Ah, y deja de tirar moneditas porque 1) lo único que vas a lograr es perder ese dinero y 2) también está prohibido.
8. Ir sin chándal por un polideportivo
Que sepas que eso de ir a ver a los amigos sudar la camiseta mientras tú estás tranquilamente al lado tomando una horchata está prohibido. O tienes indumentaria y calzado apropiado o de aquí parece que sobras.
9. La charraeta en la acera
Con lo que nos gusta eso de encontrarnos unos cuantos al azar y quedarnos un rato pegando la hebra en donde sea… pues el Ayuntamiento viene a regular eso: “los peatones no deberán detenerse en las aceras formando grupos, cuando ello obligue a otros usuarios a circular por la calzada”.
10. Lavar las chanclas (y cualquier cosa) en la playa
A ver… ¿vuelves de la playa a casa, porque ya es tarde, y tienes que ir con todo lleno de arena? Pues si hacemos caso a la Ordenanza de Abastecimiento de Aguas, sí, es la intención. Te deseo un viaje corto, que andar con los pies llenos de arena y las chanclas puestas es de todo menos agradable. Las duchas de la playa no deben usarse para enjuagar los trastos.
¿Cuántas de estas acciones prohibidas has realizado? Más de una y más de dos, seguro. Ahora, avisados estáis, que el desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento, como dicen los que saben de derecho.