Resolver un cubo de Rubik así, a las bravas y sin mirar nada por internet ni recibir explicaciones de alguien que sabe no es cosa fácil. Estamos de acuerdo, ¿no? Pues imagina tener que hacerlo con los ojos vendados. O con los pies. O un cubo de 7×7 hileras.
Esto son solo algunos ejemplos de los retos que tendrán que superar los participantes del Campeonato Nacional de Cubo de Rubik, que se celebrará en Valencia del 13 al 15 de octubre de este año y que dará una plaza para el campeonato mundial. En total se practicarán 18 modalidades del célebre puzzle.
Porque el cubo de Rubik ya es más que el clásico cubo con tres hileras de tres caras de colores. Ahora los retos pueden multiplicarse hasta casi el infinito. Cubos de dos, cuatro, cinco, seis o siete hileras, puzzles como el Megaminx (un “dodecaedro de Rubik”, por así decirlo), el Pyraminx (con forma de tetraedro), el Square-1 o el Skewb (dos pruebas de que el infierno existe y tiene forma cúbica).
El cubo de Rubik y el TDAH
Para el campeonato nacional se utilizará el Centro Deportivo y Cultural de La Petxina. El campeonato de Valencia se celebró apenas hace unos días en la localidad de La Torre, y participaron más de 200 personas.
Este juguete está muy recomendado además por la Asociación TDAH+16, que cuenta incluso con un club de cubo de Rubik. Fue justamente este club el que planteó al ayuntamiento de La Torre el acoger el torneo regional. Este rompecabezas es una muy buena actividad para personas con TDAH porque se trabaja mucho con la discriminación y agudeza visual.