En el seno de Twitter y no necesariamente vinculado a ninguna ciudad concreta (es más, como campaña nacional) ha nacido #LucesNo, un movimiento que exige que el dinero de las luces navideñas se destine a los más necesitados. El objeto de estas ayudas sería, según propone la ciudadanía, hostelerxs, autónomxs y cualquier persona que esté sufriendo la crisis derivada de la pandemia.
La campaña, que involucra a cientos de personas diferentes, podría ayudar con varios millones de euros al mencionado público objetivo, ya que solo en Madrid se destinan cerca de tres millones de euros al alumbrado navideño. Las famosas luces de Vigo suponen una inversión de más de un millón de euros, mientras que el coste del alumbrado de Valencia en 2019 supuso «solo» 88.000 euros (según Newtral).
A los de #LucesNo: con su ‘buena intención’, ¿no se dan cuenta que es desvestir un santo para vestir a otro? ¿Que las empresas de iluminación también tienen su crisis, que no han tenido ni verbenas ni fiestas este verano? ¿Que no tendrían otros que estar bajándose el sueldo?
— Natalia G. Serna (@ngserna) November 3, 2020
“Para que queremos luces navideñas, ¿para iluminar la miseria?”, dice un usuario. Sin embargo, no hay unanimidad al respecto y algunas personas señalan que es “desvestir un santo para vestir a otro”. Y es que las empresas de iluminación también han visto cómo menguaban sus ingresos, sobre todo después de que este verano no tuvieran presencia en ninguna verbena ni fiesta popular.