La autora de la nueva catastrofe gastronómica fue la valenciana Aniuska, que la pobre no pudo controlar bien sus nervios en la prueba de eliminación del programa de ayer de Masterchef 4.
Ni el sabor del bizcocho, ni el nombre con el que lo bautizó (“bomba de sangre”) y mucho menos la presentación eran dignos del programa, según los tres jueces. El bizcocho de la valenciana fue un fracaso rotundo. El jurado dictaminó con bastante dureza que estaba demasiado dulce, (bien relleno de leche condensada) y que el emplatado dejaba mucho que desear. Por eso decidieron que fuera Aniuska la primera expulsada de esta cuarta edición del programa de cocina.
Puede que su plato no fuera el más apetecible del mundo, pero seguro que a todos se nos puso un nudo en el estómago con la expulsión de esta pobre valenciana. Su cara de pena no se nos olvidará en mucho tiempo. Algunos comparan su bomba de sangre con el famoso “León come gamba”… Aunque por lo menos a Aniuska no le hicieron pasar la vergüenza a la que sometieron al pobre Alberto, el estudiante de medicina creador del famoso mamífero comedor de pescado. Juzguen ustedes mismos ambos resultados.