La abundante nieve en el interior y lluvias en el litoral de la Comunitat Valenciana que ha dejado la borrasca Filomena durante el fin de semana dan paso ahora a dos nuevos fenómenos meteorológicos: una ola de frío y las heladas, con grandes placas de hielo en las zonas donde ha nevado.
La Agencia Estatal de Meteorología ha emitido un aviso amarillo durante el lunes y el martes para el interior y litoral de Valencia por bajas temperaturas, que oscilarán entre los -2 grados de mínima en las zonas costeras y -6 en el interior.
La nieve permanecerá al menos una semana debido a estas bajas temperaturas. Con la llegada del frío será entonces cuando se vuelva más peligroso salir a la calle por las grandes placas de hielo que se pueden crear en aceras y carreteras.
Esta situación amainará con la llegada de la próxima semana, con un aumento ligero de las temperaturas que ayudará a fundir la nieve y placas de hielo restantes.