Hoy todos la conocemos como la Plaza del Ayuntamiento, pero no siempre ha sido así. Este emblemático enclave de Valencia viene cambiando su nombre desde finales del siglo XIX.
Hasta 1891 la plaza no existía como tal. Aquí se ubicaba el convento de los franciscanos, conocido como Sant Francesc y que da nombre ahora al barrio más céntrico de Valencia. Esta demarcación fue otorgada ala orden religiosa por Jaume I tras la conquista de Valencia y desapareció con su derribo antes de la llegada del siglo XX a la ciudad.
La primera denominación de la plaza se produjo en 1840 tras la desamortización de Mendizábal. Por un breve periodo de tiempo se pasó a llamar General Espartero. Pero solo era el inicio de una lista de 8 cambios.
En 1843 se pasó a llamar plaza de Isabel II hasta que en 1868 cambió de nuevo con la llegada del Sexenio Revolucionario que le dio el nombre de plaza de la Libertad. Durante la Restauración volvió a ser la plaza de San Francisco.
Entró el siglo XX y pasó a denominarse Emilio Castelar, su nombre que más ha durado hasta el momento. Al final de la Guerra Civil se llamó plaza del Caudillo, un nombre que permanecería hasta 1979.
Con la llegada de la democracia se impuso temporalmente la propuesta plaza del País Valencià, antes de cambiar en 1987 a su nombre actual: plaza del Ayuntamiento.