A finales de la década de los 70, veranear en las playas de El Puig tenía un aliciente nocturno insólito en otra ciudad del mundo. La cabina de un avión comercial de la compañía McDonnell Douglas era la sala de fiestas más envidiada de la zona, un proyecto un tanto excéntrico y loco que durante años atrajo a multitudes hasta esta zona de Valencia.
El «Boite DC-7», como así se conocía al club, tenía una capacidad para 70 personas, lo que le dotaba de un ambiente exclusivo para la época y con el auge de la Ruta por el sur de Valencia. En su interior contaba con una cabina de disc-jockey, barra de bar y una terraza exterior. Era un punto de encuentro habitual entre veraneantes de la zona.
Además de discoteca, también fue un prostíbulo, un club gay y hasta un restaurante antes de desaparecer hacia 1993.
La historia inicial de esta aeronave fue dada a conocer por el portal Aeropuerto de Valencia en un reportaje. Los orígenes del McDonnell Douglas se sitúan en torno a 1960 cuando circulaba con matricula XA-LOB y formaba parte de la flota de la aerolínea estadounidense Saturn Airways para el transporte de pasajeros.
Una década después de su fabricación fue trasladado a Madrid para su desguace tras sufrir daños en el aeropuerto de Bristol en Reino Unido. 8 años después, en 1977, el empresario Juan Guerrero Moles traslado el aparato hasta la playa de El Puig donde lo convirtió en la famosa discoteca DC-7.
Cuenta la leyenda que James Brown y Bruno Lomas pasaron aquí alguna que otra noche. Pero, ¿y tú? ¿Conociste esta discoteca tan extraordinaria?
Fuente original: Aeropuerto de Valencia
Foto de portada: aeropuerto-valencia.es