Y finalmente, ocurrió. No queríamos hablar de ello porque parecía que no iba a ocurrir, pero el tristemente conocido bus tránsfobo llega hoy a Valencia. Es así. Las calles de Quart de Poblet serán testigos de su llegada.
El Ayuntamiento de Valencia se opone firmemente a la entrada de un mensaje como este, pero el tercer vehículo flotado por la plataforma ultracatólica no ha podido ser frenado por la justicia y por lo tanto circula libremente por España.
¿Libremente? Hasta cierto punto. No es precisamente bienvenido allá donde va. En Sevilla por ejemplo lo recibieron a pedradas. No sabemos si en Valencia ocurrirá también, lo que sí se sabe es que se han tomado medidas para intentar frenar, en lo posible, su circulación.
Por ejemplo, sabemos que la Policía Local fletó un autobús con un mensaje completamente antagonista. Y varios colectivos LGTB también hará cuanto esté en su mano para que no circule o lo haga con el máximo de dificultades por nuestras calles.
De momento, el fundador de la plataforma ha convocado una rueda de prensa en una gasolinera de Quart de Poblet para «pedir a los ciudadanos que despierten y hacer ver a los políticos, que solo piensan en votos, que no quieren que les impongan la ideología de género».
El bus del odio
Pese a que la plataforma insiste en que el objetivo de su vehículo es protestar contra la instrumentalización del sistema educativo, lo cierto es que los distintos lemas que han aparecido en su lomo han ido dirigidos contra la transexualidad, tratando de aleccionar.
Esto además ha sido calificado por muchos como “incitación al odio” contra un colectivo de por sí maltratado. De hecho esa es la razón por la que el primer bus esté aún retenido en Madrid.
¿Llegará a las calles de nuestra ciudad o será expulsado como ocurrió en Sevilla?
Fuente de la imagen de portada: TVN2.com