Así son las cosas: el barrio de Benimaclet amaneció ayer lleno de basura y mal olor. ¿Por qué? Por un macrobotellón carnavalero. Botellón que se extendió hasta las siete de la mañana del domingo.
Por supuesto, las brigadas de limpieza se han puesto a limpiar a fondo. Pero muchos vecinos que han dormido mal (o directamente no han dormido) se lamentan de que el dinero de sus impuestos tenga que invertirse en esto.
Porque además no es solo la basura o el olor a orines. Es también el ruido, los disturbios y el escándalo que este “evento” genera. El portavoz de la asociación Benimaclet Descansa, Paco Guardeño, recordó que su plataforma se creó precisamente para fomentar el derecho al descanso en este barrio.
El botellón se celebró pese a la negativa del Ayuntamiento a autorizarlo. En primer lugar, se pidió la plaza de la Iglesia. Al denegarse, se solicitó el campo de fútbol del Sporting de Benimaclet. Como la petición también fue rechazada, la fiesta pasó a las calles.
Este barrio es uno de los más castigados por los botellones. Y aunque el Ayuntamiento se ha comprometido a incrementar las denuncias para tratar de reducirlos lo cierto es que está siendo insuficiente.
Menos multas por botellón
La Federación de Vecinos de Valencia, por otra parte, ha puesto el grito en el cielo: las sanciones al botellón han caído de 826 en 2015 a solo 333 durante el año pasado.
La presidenta de la Federación, María José Broseta, indicó que el Ayuntamiento debe seguir en guardia frente al problema del botellón. “Por lo menos, queremos que la Policía Local incaute todas las botellas que pueda y que notifique a los padres cuando identifique a menores”.
Si bien se logró una pequeña victoria al desterrar el botellón gigante del aparcamiento del campus de Tarongers, la consecuencia ha sido la creación de pequeños botellones en el resto de barrios de la ciudad alrededor de casi cada discoteca.
Los residentes, en general, reclaman una mayor presencia policial para evitar estas aglomeraciones y todo lo negativo que atraen. De momento, el Consistorio ha reforzado el baldeo los fines de semana para frenar la acumulación de suciedad… y las protestas de los vecinos. Una medida que, a todas luces, parece de momento insuficiente.
Fuente de las imágenes: Twitter de ValenciaEscucha