Estos días, Valencia se ha llenado de voluntarios para ayudar en las zonas más afectadas por la DANA. Debido al estancamiento de agua y la contaminación que provocaron las riadas, hay una serie de medidas que ha aconsejado la Conselleria de Sanidad, como utilizar mascarillas y guantes, que todos deberíamos seguir.
Sin embargo, puede ser que, a pesar de tomar las medidas necesarias, nos hayamos infectado. Por eso, es muy importante, tanto si somos voluntarios, como si vivimos en una de las zonas afectadas, que estemos atentos a estos síntomas y, en caso de tenerlos, acudir a un Hospital o Centro de Salud.
Estos son los síntomas que pueden provocar los efectos de la DANA en Valencia con los que tenemos que vigilar:
- Fiebre elevada y persistente
- Diarrea o vómitos intensos o persistentes, por el riesgo a sufrir deshidratación.
- Sequedad en la boca o disminución de la orina.
- Dolor abdominal intenso.
- Coloración amarillenta de la piel y los ojos.
- Orina oscura.
- Tos persistente o dificultad para respirar.
- Erupciones rojas o púrpura en la piel que puedan indicar.
- Dolor de cabeza intenso o rigidez de cuello.
- Confusión, desorientación o agitación.
- Heridas abiertas o lesiones; sobre todo, si muestran signos de infección, como enrojecimiento, hinchazón, secreción o dolor.
- Sentir un nivel de estrés o ansiedad.
Respeto a la vacunación, Sanidad ha dicho lo siguiente:
- No se considera necesaria una campaña de vacunación masiva en este momento.
- Se ha reforzado la disponibilidad de vacunas en los centros de salud, especialmente aquellas que podrían ser necesarias ante un aumento de la demanda (tétanos, difteria) o posibles brotes (hepatitis A).
- Se mantiene la vacunación sistemática y las campañas de vacunación estacional (gripe, COVID-19, VRS en niños).
- Se recomienda a los profesionales sanitarios revisar el estado de vacunación de las personas que acuden a consulta, aprovechando cualquier oportunidad para completar el calendario vacunal.